CAMISERA. – Dexá esso y notá que me dixo esta forastera que tenían un tío que murió con fatum (gehoben) callos en las manos, de la vara de la justiçia, y debíe de ser que sería cortidor. SEVILLANA. – ¡Mostrad, por mi vida! ¡Viváis vos en el mundo y aquel…